Como escribir tus mensajes en LinkedIn para convertir

Seguro que muchas veces te has encontrado con un mensaje y te has preguntado, ¿por qué me han mandado esto? Y directamente lo has borrado. Eso ocurre con demasiada frecuencia. Por ello, antes de enviar un mensaje debes pensar a qué público te interesa dirigirte.

Con una estructura de redacción adecuada y escogiendo correctamente al target, se pueden conseguir tasas de respuesta del 40-50%.

Sí, cuando mandamos un mensaje en LinkedIn queremos vender algo. Pero la manera de presentarlo es lo que influye en que lo consigas o no. Una vez conoces el público tienes que presentar una propuesta concreta que aporte solución a un problema concreto. Un mensaje genérico no va a ser atractivo.

Si trasmites que tienes la solución a ese conflicto a tu público le será más difícil decirte que no. Y eso es lo que buscamos. Que te digan que sí y que quieran escucharte.

Si conoces a tu público y tienes la solución a su problema tienes que atraer su atención. Ahí es donde es importante saber cómo escribir tus mensajes en LinkedIn para convertir.

Y lo primero que hay que hacer es personalizar el mensaje y ofrecerle algo que sea relevante para él y explicarle cómo le puede ayudar. Así atraerás su atención, le harás reflexionar y estarás más cerca del sí.

Cuando mandas un mensaje, ¿estás pensando solo en tu propio beneficio o también en el del cliente? Porque si es solo en tu beneficio, se notará y el receptor directamente pasará de él. En cambio si ofreces una relación en la que los dos ganéis será más fácil que el receptor se muestre receptivo.

Antes de hacer el envío de mensajes debes definir tus OBJETIVOS.

Es preferible que escribas un mensaje corto y que vayas al grano. Según LinkedIn los mensajes de menos de 100 palabras tienen un 50% más de probabilidades de obtener una respuesta. Y mejor que las cosas importantes vayan al principio.

Elimina todos los términos que tengan que ver con vender. El mensaje tiene como objetivo atraer la atención y fijar una llamada o una reunión. Por eso tienes que iniciar una conversación, mostrarte interesado por su trabajo y explicarle como puedes serle útil o cómo les puedes aportar valor. Tienes que demostrar que tienes un interés real por él, que no se trata de un spam.

No intentes disfrazar un mensaje masivo como si fuera personal. Se nota. Si personalizas el mensaje obtendrás una mayor relevancia y será más atractivo para el receptor. Para ello, revisa su perfil y utiliza esa información para personalizar el mensaje. Da las gracias. Parece una tontería, pero si agradeces el tiempo que ha dedicado en leer el mensaje la persona se sentirá valorada. Y más si en ningún momento has escrito un mensaje de venta si no que le has propuesto una solución.